TRES TRIUNFOS CON LOS PIES EN EL SUELO: FELICES FIESTAS

En estas fechas donde tenemos las fiestas navideñas como escenario, muchas personas hacen balance del año que se acaba y ponen en el nuevo año muchas ilusiones y propósitos.

Son buenas y bonitas costumbres a pesar de que el balance nos pueda gustar, y podamos tener más o menos propósitos para el nuevo año. Unas veces pasamos estas fiestas con más ánimo, con más ilusión, otras veces con más tristeza y melancolía, pero lo que está claro es que en nuestra vida vamos cumpliendo ciclos, abriendo y cerrando puertas, y lo que nos alenta, es encontrar en nuestro viaje, sea cual sea, gente que nos acompaña, gente que nos da la mano y que está cerca o lejos, pero a nuestro lado.

Sinceramente es el primer rato que me dedico a esto, a parar un minuto y pensar, y entiendo, que si no lo he hecho antes, es indicador de algo bueno, es indicador de que las cosas van bien, que tengo la mente ocupada, y hay que reconocer que para mí ha sido un año de cambios positivos , con desilusiones, las justas.

Estos tres últimos meses del año han sido de "locura municipal" y los últimos días repletos de noticias interesantes dignas de mencionar en este blog, pero la verdad, me quedo con tres temas fundamentales que recogen muchas cosas, ilusiones, objetivos, lucha, igualdad, derechos, ciclos en la vida... El 60 Aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el 30 Aniversario de la Constitución y el NO a las 65 horas. Tres ejemplos y tres triunfos para la humanidad, para la sociedad, para la libertad y la igualdad de los ciudadanos.

Pero a pesar de todo esto, en estos días precisamente no nos podemos olvidar, ni en nuestros balances, ni en nuestras reflexiones y objetivos, de todo lo que nos queda por hacer, de todas las injusticias que hay, desde la más cercana hasta la más lejana, desde la lejana a la cercana.

Y a veces en el día a día, cuando estemos en nuestro ritmo metidos, no perdamos nunca la perspectiva, y pensemos siempre en el que no tiene balance que hacer porque no puede, en el que no tiene objetivos en los que pensar porque no puede tenerlos y pensemos en esa mano que siempre necesitamos y que nosotros también podemos tender.


Gracias a los que me habéis tendido vuestra mano, gracias a los que me habeis dejado que os la tienda.

FELICES FIESTAS

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un año para olvidar